Después del verano nuestra piel acaba resentida de los excesos de esta temporada. El sol y los cambios bruscos de temperatura pasan factura y acabamos con la piel reseca, deshidratada y poco luminosa. El Doctor Ortega, dermatólogo de la Clínica Menorca, nos aconseja que “para cuidar la piel después del verano, debemos tomar mucha fruta y mantener la piel hidratada aplicando cremas calmantes, regeneradoras y emolientes”.
Buen momento para adoptar nuevos hábitos
Para que nuestra piel no sufra un envejecimiento prematuro y podamos lucir un rostro bonito y luminoso debemos seguir unos sencillos cuidados que se convertirán en nuestra rutina de cada día para el resto del año. Tal y como nos explica el Dr. Antonio Ortega, dermatólogo de la Clínica Menorca, “el primer paso fundamental es la limpieza de la piel tanto por la mañana como por la noche con limpiadores de ph neutro que no irriten la piel. El segundo paso que debemos realizar es la aplicación de una crema hidratante. Debemos tener en cuenta si es de día aplicar un serum antes de la crema hidratante que nos proteja la piel de los radicales libres y un protector solar para proteger la piel de la radiación, después de la crema hidratante si no tiene SPF”.
– Cuidados fundamentales:
- Limpiar la piel por la mañana y por la noche, y nunca, por muy cansada que estés, acostarte maquillada.
- Salir a la calle con la piel protegida del sol, incluso en los días nublados, la piel tiene memoria y con el paso de los años la piel lo agradecerá.
- Cuidar la alimentación para hidratar y nutrir la piel desde dentro. Intenta evitar en lo posible los dulces y la comida preparada que contiene en exceso sal, azúcar y grasas hidrogenadas. Los aliados de la piel son la fruta, la verdura, el pescado y las carnes blancas. Y no olvides beber mucha agua.
- Intenta dormir lo suficiente, el sueño reparador ilumina la piel y evita las ojeras.
- Evita el sedentarismo, el movimiento es salud y vida.
Cuidados de la piel según la edad
Tratamientos para después del verano ¡y siempre!
A LOS 20
– Cuidados básicos de la piel: A los 20 años es importante conocer el tipo de piel, si es normal, sensible, grasa o mixta, es muy raro que sea seca. Para mantener la frescura, luminosidad y tersura de la piel joven lo más importante es la limpieza, todos los días por la mañana y por la noche, con agua miscelar o con un producto específico en gel, crema o loción e hidratarla con una crema ligera adecuada para el tipo de piel. Durante el día hay que proteger la piel del sol, con una base que contenga protector solar, mínimo SPF 15.
– Tratamiento médico estético aconsejado: Ninguno.
A LOS 30
– Cuidados básicos de la piel: Comienzan a aparecer los primeros signos del envejecimiento: pérdida de luminosidad, deshidratación y líneas de expresión. Es fundamental la limpieza en tres pasos: desmaquillar, limpiar y exfoliar. Comienzan a aparecer los radicales libres, hay que mantener la piel hidratada y utilizar sérum y una crema de tratamiento con vitaminas E y C que son antioxidantes y disminuyen las líneas de expresión. Si se tiene la piel seca es el momento de utilizar el contorno de ojos de día y de noche con pequeños toquecitos, no arrastrando el producto, la piel en esta zona es muy sensible. Una vez a la semana una mascarilla regeneradora, astringente o iluminadora. Si se toman anticonceptivos o se está embarazada hay que tener especial cuidado en proteger la piel del sol, los cambios hormonales pueden provocar manchas oscuras en la piel.
– Tratamiento médico estético aconsejado: Todos ellos son tratamientos preventivos.
- Mesoterapia facial con ácido hialurónico no reticulado, no muy denso, con vitaminas y minerales, dos sesiones al mes y después sesiones de mantenimiento en los cambios de estación.
- Peelings químicos médicos, si no hay patología como manchas, para dar luminosidad es suficiente con una sesión al trimestre.
- Carboxiterapia para activar la microcirculación sanguínea y linfática y estimular la producción y reorganización de fibras de colágeno y elastina aportando mayor tonicidad y turgencia.
Los cuidados que se aconsejan a una edad, hay que seguir manteniéndolos siempre.
A LOS 40
– Cuidados básicos de la piel: Se empieza a perder firmeza y tonicidad porque se ralentiza la renovación celular y se va perdiendo colágeno, las arrugas son más acusadas y comienzan a aparecer los signos de fatiga en la piel. La rutina diaria de limpiar, hidratar, nutrir y proteger la piel es fundamental. La fórmula antiedad para una piel normal a partir de los 40 años es un fotoprotector solar con vitamina C por la mañana y por la noche alternar el ácido retinoico con el ácido glicólico.
– Tratamiento médico estético aconsejado:
- Rellenos con ácido hialurónico denso para el arco nasogeniano y la arruga de marioneta.
- Tratamientos específicos para la flacidez como el trifosfato cálcico, para dar tersura. Terapia Celular con factores de crecimiento que activan los fibroblastos, responsables de la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico.
- Hilos tensores que también estimulan los fibroblastos regenerando la piel, tensando el tejido y corrigiendo la flacidez.
A LOS 50
– Cuidados básicos de la piel: Es la época de los cambios hormonales debido a la menopausia: se pierde elasticidad, la piel se reseca y se vuelve más fina, las arrugas de gesticulación están marcadas y puede ser que aparezca hiperpigmentación. Se deben extremar los cuidados de hidratación y nutrición de la piel y activar la regeneración celular con productos específicos antiedad con vitamina C, y comenzar a utilizar el ácido retinoico por la noches.
– Tratamiento médico estético aconsejado:
- Tratamiento para eliminar arrugas en el tercio superior de rostro (frente, entrecejo y patas de gallo).
- Bioplastia para corregir la flacidez que invierte los volúmenes de un rostro joven y para rellenar las arrugas.
- Tratamientos con láser para rejuvenecimiento facial como el CO2 fraccionado para reducir arrugas finas de los labios, frente y patas de gallo, para tratar el envejecimiento solar de cara, cuello y escote, para las manchas de la edad y lunares y verrugas, rojeces cutáneas y láseres específicos para eliminar léntigos, hiperpigmentación y el melasma.
+ DE 60
– Cuidados básicos de la piel: El principal problema es la deshidratación de la piel, la falta de colágeno y elastina que provocan la aparición de pliegues y arrugas, y las manchas. Pero el daño principal a esta edad es el efecto acumulativo por la falta de cuidados en las etapas anteriores o haber tomado el sol en exceso. Después de los 60 hay que extremar los cuidados de la piel, la limpieza, hidratación, exfoliación y nutrición. Son muy aconsejables las cremas con ácido retinoico o con ácido glicólico (nutre e hidrata).
– Tratamiento médico estético aconsejado: Los mismos tratamientos que están indicados a los 50.