La diástasis abdominal se aprecia especialmente cuando se realizan esfuerzos o con el simple gesto de levantarse de una silla. Aunque no se conozca por este nombre, es un problema bastante común. A continuación, vamos a conocer los detalles y los diferentes tratamientos disponibles.
¿Qué es la diástasis abdominal?
La diástasis abdominal es una dolencia causada por la separación de los músculos rectos del abdomen.
Nuestro abdomen está formado por varios músculos entre los que encontramos el recto derecho e izquierdo. Cada uno se sitúa de manera vertical a los lados del ombligo y son los que solemos ejercitar cuando queremos tonificar la zona. Su cometido principal es mantenernos erguidos y estables, además de permitirnos inclinarnos y favorecer la respiración.
Estos músculos están unidos por tejido conectivo que puede verse alterado si, por ejemplo, se ha estirado más de lo que podía soportar o estaba debilitado. En esos casos, su función se resiente y deja de mantener juntos los dos rectos abdominales, provocando una diástasis de rectos. El resultado es una separación de estos músculos al nivel de la línea de alba. Esta línea recorre nuestro abdomen por el centro desde la altura inmediatamente inferior al pecho, aproximadamente, hasta el pubis.
Causas comunes y factores de riesgo de la diástasis abdominal
Puede aparecer a cualquier edad, pero es cierto que existen factores de riesgo que pueden fomentar su desarrollo.
Una de las causas más habituales que provocan la diástasis abdominal es la realización de un sobreesfuerzo al levantar algo muy pesado. Pero existen otras situaciones que pueden favorecerla.
Gestación y embarazos múltiples
Hay algunos factores que pueden facilitar la aparición de una diástasis abdominal. Los dos principales son el peso del bebé o musculatura débil de la zona en el caso de la madre. También los embarazos múltiples tienen más probabilidad de alterar los tejidos conjuntivos, provocando que dejen de cumplir con su función de manera correcta.
Además, durante el parto también se produce un sobreesfuerzo, especialmente en aquellos que en los que hay muchas horas de pujo. La zona abdominal aumenta de volumen en muy poco tiempo. Estos cambios fisiológicos en el organismo tienen en el objetivo de crear espacio a la criatura en crecimiento.
Aumento de peso
Especialmente aquel que afecta al perímetro abdominal, puede generar problemas en los músculos rectos. Se debe principalmente al incremento de la presión intraabdominal. Es por ello por lo que afecta a más personas con sobrepeso y obesidad.
Tos y estreñimiento
El estreñimiento continuado también pueden afectar de manera negativa a la pared abdominal. La tos, que genera una actividad poco común en el abdomen, puede afectar al abdomen.
¿Cuáles son los síntomas de la diástasis de rectos abdominales?
Una de las primeras señales de una diástasis abdominal es la aparición de un bulto en la zona que se sitúa encima del ombligo. Sin embargo, no es un abultamiento permanente. Se aprecia cuando se permanece de pie y cuando se flexiona el área del vientre, Desaparece cuando la persona se tumba.
Aunque no suele ser doloroso, la diástasis sí que se asocia a problemas relacionados con el dolor lumbar y alteraciones del suelo pélvico. Además, puede suponer un problema estético debido a la apariencia flácida que adquiere el vientre y que suele acompañar a descolgamientos de la piel.
¿Cuáles son los tratamientos más eficaces para la diástasis de rectos?
Existen varios procedimientos que permiten abordar esta problemática y la elección del más adecuado se realizará tras una evaluación inicial del equipo médico. Según la valoración, en algunos casos puede ser recomendable seguir una pauta de ejercicios con la supervisión de un fisioterapeuta especializado.
Tratamientos con intervención quirúrgica
También hay alternativas quirúrgicas para la diástasis abdominal, como la abdominoplastia. Es una intervención con la que se pueden reforzar los músculos de la zona. Al mismo tiempo que se elimina la grasa, la piel sobrante y se recoloca la ubicación del ombligo de ser necesario. El objetivo de que quede en armonía con las dimensiones del cuerpo. Así, se mejora la situación de los tejidos, pero también se combate la flacidez.
Lo más importante para tratar la diástasis abdominal es contar con profesionales con experiencia. En Clínica Menorca tienes especialistas que podrán asesorarte desde el mismo diagnóstico para lograr los mejores resultados según tu caso personal, así que no dudes en consultarles.
