Hilos de oro faciales: lo que nadie te contará

Que la belleza está en el interior nos lo han repetido mil veces y estamos de acuerdo, pero como decía el escritor inglés Charles Reach, «la belleza es poder, una sonrisa es una espada». Mirarse al espejo y querer ver un rostro terso y lozano no es una preocupación exclusiva de nuestro siglo, desde la Prehistoria se ha rendido culto a la estética. ¿A quién no le preocupa la estética facial? ¿Quién no quiere tener el rostro de una veinteañera? Si hasta la mala de Blancanieves dejaba ver sus debilidades al preguntar a su espejo quién era la más guapa del reino, ¿cómo nostr@s no vamos a caer en la tentación…? Es por ello que en los años 80 llega un auténtico boom con el uso de los hilos de oro, pero que con el tiempo ha ido cayendo en desuso. Repasemos la historia del hilo de oro facial y lo que ha venido después.

Origen y desarrollo de los hilos de oro para estirar la cara: hilo de oro, estética con contraindicaciones

Los hilos de oro para estirar la cara tuvieron una gran acogida en la sociedad, pero aunque se obtuvieron resultados óptimos, también provocaron reacciones alérgicas al material empleado.
Sin embargo la medicina avanza en todos los campos y en estética no iba a ser menos. En este sentido se han desarrollado varias generaciones de hilo facial con resultados cada vez mejores y más duraderos, ¿quieres saber cuáles son? Son los hilos tensores, toda una revolución para prevenir y eliminar la tan temida flacidez, de una manera natural y duradera. Estos han sustituido al primigenio hilo de oro: estética y belleza en general se han desvinculado de él.

Dependiendo de la edad, fisonomía y grado de envejecimiento del paciente, se emplearán tipos de hilos tensores diferentes, por eso, desde Clínica Menorca siempre hacemos hincapié en la importancia de ponerse en manos de especialistas, para que la valoración sea precisa y el tratamiento personalizado. Y bien, ¿cuáles son esos tratamientos que han sustituido a los hilos de oro para la cara?

Alternativas al hilo de oro facial: opciones mejoradas a los hilos tensores de oro

Los Hilos para reafirmar la piel o Monofilamentos, formados por Polidioxanona (PDO), favorecen la producción de colágeno y fibroblastos. Se colocan de manera subcutánea, sin anclajes ni suturas y su duración es de unos doce meses.

Los Hilos Espiculados, como su nombre indica, tienen unas espículas bidireccionales que generan más cantidad de colágeno y fibroblastos, produciendo una mayor tensión, reafirmando de una manera más notable la piel y potenciando la elevación facial. Está indicado para aquellas personas que tengan una flacidez media. En este caso, aunque el organismo reabsorbe los hilos a los 10 – 14 meses,  los efectos pueden durar algo más.

Por último, si tienes un mayor grado de flacidez, te recomendamos los Hilos de Cono, compuestos de Ácido Poliláctico y cuyo resultado es más prolongado. Estos tratamientos de rejuvenecimiento facial están indicados para pacientes que quieran redefinir su rostro, generar una mayor tensión y recuperar el volumen de una manera inmediata.

¿Cuáles son los resultados de los hilos de cono, hilos espiculados y demás tipos de hilos tensores para la cara?

Estos hilos, más efectivos y mejorados que aquellos hilos tensores de oro, eliminan la caída de la piel del tercio medio del rostro, la pérdida de volumen malar, la caída de la línea mandibular, la relajación del cuello y corrigen la caída de la ceja. Uno de los tratamientos más recurrentes para reafirmar el rostro.
Quizás te preocupe el proceso de implantación de los hilos. Puedes estar muy tranquil@, porque se realiza de una forma sencilla, de manera ambulatoria y lo más importante, es un tratamiento indoloro, que requiere muy poco tiempo para su colocación. Una vez finalizado el proceso, puedes incorporarte a tu vida daría inmediatamente.

¿El resultado? Pues a diferencia de otros tipos de hilos tensores, ya sean de oro u otras variaciones, son invisibles a la vista y al tacto. Todo el mundo notará una mejoría en tu rostro pero nunca sabrán el secreto de tu eterna juventud. El resultado es progresivo, poco a poco irás sintiendo una piel más elástica y brillante, un aspecto más descansado y, lo más importante, sin perder tu expresión facial. Para potenciar el efecto de los hilos, se pueden combinar con otros tratamientos de rejuvenecimiento facial.

Y ahora, ¿a qué estás esperando para que tu cara refleje la juventud de tu espíritu? ¡Los descendientes de los hilos de oro te esperan!