La digestión es un proceso de nuestro aparato digestivo que transforma los alimentos en sustancias que el organismo asimila. Una buena digestión permite descomponer los alimentos que ingerimos de forma adecuada, así como absorber los nutrientes y eliminar las toxinas de manera correcta.
Sin embargo, los problemas digestivos son cada vez más comunes. La sensación de pesadez, la hinchazón abdominal, el malestar, los gases o el estreñimiento son algunas de las muchas consecuencias que produce una mala digestión.
Conseguir una nutrición y digestión sana está en nuestras manos. Llevar una buena alimentación, además de ser la base de las dietas efectivas, es un primer paso para controlar y mitigar estos problemas de digestión y malestar que irrumpen nuestro día a día. Tu dieta deberá incluir una serie de alimentos que contribuirán a una buena digestión.
Mejorar tu digestión con comidas digestivas: estos son los ingredientes
Lo primero que debes incluir en tu alimentación es la fibra (entre 25 y 30 gramos al día). La fibra ayuda a mover la comida a través de los intestinos y favorece el tránsito digestivo. También ayuda a prevenir enfermedades digestivas y el estreñimiento. Los cereales integrales, las leguminosas, las verduras y las frutas son alimentos que contienen mucha fibra y fáciles de introducir en tu dieta diaria.
Elige la versión integral de la pasta, el arroz o el pan y escoge cereales de grano entero. Incorporar las verduras y las frutas a tu dieta es también esencial para favorecer tu digestión. Una de las verduras con mayor poder digestivo son las alcachofas. Contiene cinarina, una sustancia ácida que estimula la producción de bilis necesaria para una buena digestión de las grasas. Además, alivia la acidez del estómago, regula el estreñimiento y las diarreas y tiene un alto contenido en fibra.
El jengibre es otro alimento que mejorará tu digestión. Esta raíz favorece la absorción de nutrientes y ayuda a prevenir y aliviar el estreñimiento. Además. sus aceites tienen propiedades anti inflamatorias que contribuyen a combatir los dolores abdominales.
Otro alimento que debes introducir en tu dieta es el hinojo. Combate las digestiones lentas y pesadas y, gracias a sus aceites, tiene propiedades antiflatulentas y diuréticas.
Nutrición y digestión: manzanas, yogur y aceite de oliva, tus aliados
Seguimos trabajando la digestión: alimentos que la favorecen hay muchos. En cuanto a las frutas, las manzanas facilitan el tránsito gracias a sus fibras solubles y a su contenido en pectina, un tipo de fibra que se encarga de eliminar residuos y toxinas que se encuentran en nuestro cuerpo. También reduce el estreñimiento y la diarrea y disminuye el colesterol malo.
Otra fruta que te ayudará a mejorar tu digestión es el plátano. Contribuye a regular el sistema digestivo, contiene mucha fibra y favorece una flora intestinal saludable. Sumado a esto, su alto contenido en potasio ayuda al funcionamiento del tracto digestivo, participando en las contracciones musculares necesarias para digerir los alimentos.
Gracias a su alto contenido en probióticos (pequeños organismos vivos que se encuentran en algunos alimentos) el yogur es uno de los alimentos que más favorece la digestión, además de fortalecer cabello y huesos. Colabora con el buen estado de la flora intestinal y mantienen un buen tránsito intestinal.
Un alimento muy beneficioso para tu digestión y fácil de introducir en tu dieta diaria es el aceite de oliva. Protege del reflujo gástrico que produce acidez y favorece una mejor absorción de nutrientes en los intestinos. Uno de los superalimentos más poderosos de los que podemos presumir en la dieta mediterránea.
Para la perfecta digestión alimentos ligeros y una cosa más
Por último, el gran elemento que nunca debe faltar en tu alimentación es el agua. Consumir abundante agua a lo largo del día asegura el buen funcionamiento de todos los procesos de nuestro cuerpo, incluyendo el digestivo. El agua disuelve los nutrientes de los alimentos, los transporta a las células y ayuda en el proceso de eliminación de las sustancias que el cuerpo no necesita. Es recomendable ingerir, como mínimo, dos litros de agua al día.
Incluir estas comidas digestivas en tu dieta diaria contribuirá a mejorar tu tránsito, evitarás problemas digestivos y obtendrás un beneficio inmediato en el apartado digestivo. Junto a una dieta saludable, es aconsejable realizar cinco comidas al día. De esta forma, la cantidad de comida ingerida será menor, facilitando la digestión. Acompáñalo con ejercicio físico, evita el estrés y reduce el consumo de alcohol. Como ves, mejorar el proceso digestivo depende de nuestros hábitos diarios.