Las curvas están a la orden del día en el mundo de la belleza. ¿Quién lo iba a decir tras años y años de culto a la delgadez? No se libra ninguna parte del cuerpo, y menos aún el pecho. Muchas mujeres sueñan con un aumento de mamas, ya sea bien por puros complejos, por la simple razón de querer resaltar esa zona de su anatomía femenina. ¿Eres de las que se plantean con frecuencia «Quiero operarme el pecho» pero no termina de decidirse?
Lo que ocurre es que las dudas también salen a relucir cuando se trata de este tema, y es que puede que la falta de información nos haga frenarnos ante algo que tiene más de una solución segura. La cirugía mamaria es un campo de la medicina que está en pleno auge y en el que miles y miles de mujeres ya han depositado su confianza. Así que no dudéis en acercaros a Clínica Menorca donde os informaremos y ayudaremos.
Hoy en día contamos con un gran abanico de posibilidades a la hora de decidirnos por un tipo de tratamiento u otro. A continuación, os ofrecemos las mejores opciones de operaciones de pecho, todas ellas con resultados excelentes en manos de profesionales de lo más cualificados.
Quiero operarme el pecho, ¿a qué tratamiento acudo?
Mamoplastia de aumento. Es una sencilla técnica de aumento de pecho que se hace mediante prótesis del gel cohesivo. El tratamiento más aconsejable para mamas pequeñas, asimétricas o con pérdida de volumen después de la lactancia, se lleva a cabo en solo una hora, con anestesia local y sedación en régimen ambulatorio.
Otra opción es la llamada mastopexia o elevación de senos. No tenemos por qué querer necesariamente ponernos más pecho, sino que también hay mujeres que lo único que quieren es elevarlo, ya que, con el paso del tiempo, se produce una caída del mismo. Al igual que sucedía con la operación anterior, no es necesario que la paciente se quede ingresada tras la intervención y, además, solamente se requerirá sedación y anestesia local.
Para las que buscan operarse los pechos con el fin de reducirlos
Por el contrario, también hay mujeres que prefieren hacerse una reducción mamaria, pues a veces el exceso de volumen en el pecho puede provocar daños en la columna vertebral o incluso dificultades en la circulación linfática. La operación es una mamoplastia de reducción y se lleva a cabo con los mismos anestésicos que las dos anteriores.
Ahora bien, las nuevas tecnologías nos ayudan en todos los campos. En este terreno, nos aporta un simulador para ver el resultado de una intervención mamaria antes de pasar por el quirófano. Se llama Biodynamic y le permite a cada paciente elegir el tipo de prótesis y ver cómo quedaría en su cuerpo antes de operarse los pechos.
Si es que… ¿qué no podemos conseguir hoy? Los milagros no sabemos si existen, pero la medicina estética, desde luego, hace que creamos en ellos.